" Si te perdistes el amanecer que hice para ti hoy, no importa, te haré otro mañana "

DIOS.

miércoles, 29 de marzo de 2017

… Y ASI FUE LA BUENA NUEVA La gélida noche rasgo su vientre para que una estrella con su palpitar alumbrara la esperanza. El frío hizo lo propio para que la calidez de la emoción transitara hasta el anhelante corazón. La ansiedad se contraía y se expandía en armonía con el titilar de las estrellas formando un coro de voces que anunciaban la buena nueva. El tiempo en su coqueteo incesante se acelero de repente para complacer su llegada, la aurora gritaba desesperada su deseo de ser la invitada de honor, quería contemplar y ser testigo a la vez del mágico momento, junto a quienes por voluntad divina viajaban sin cesar, siendo escogidos para la sublime tarea y bendecidos por siempre cubrirán su caminar. Fue Dios quien ordeno con armonía poniéndolo todo en su lugar, permitiendole a nuestros trémulos pasos conducirnos hasta donde estaba el esperado y deseado SANTI …. Nuestro corazón no paraba de agradecérselo, convirtirtiose en caudal de emociones que la suave brisa iba juntando para arropar con su manto divino a quien era el motivo del mayor alborozo. La alegre bienvenida y la fuerte emoción se convirtieron en bailarines de la mas bella danza la cual perdurara por siempre al unísono con la bendición del Padre de la gloria. Newcastle. UK., 16/10/2016

domingo, 7 de junio de 2015

AUSENCIA Yo no estoy … ni voy no quiero … ni me importa solo lo que me conforta es lo que tengo hoy. Subes y bajas sin moverte porque no soy adivino andando por ese camino espejo del recuerdo para no verte. Buscándote en la mañana entre los pensamientos se vislumbra solo la maraña de los demás sentimientos. Pero, tu imagen altanera siempre discute su presencia que como una lumbrera guía el camino de tu ausencia. Existooo grita fuerte el corazón anteponiendo su rítmico andar diciendo solo yo puedo mandar pensamientos sin razón. h. padilla carrasco lechería, 06/06/2015
TE RECUERDO Como un torrente impetuoso las ilusiones cabalgaron, y su corazón galopo como en la pradera de los sueños La cabellera libre al viento acariciaba su pecho como perlas negras, rodando buscan su palpitar Los brazos cubrieron la ilusión sus ojos elocuentes brillaron, con labios temblorosos anuncio la tormenta que inunda Su caricia tímida y profunda se adueño de todo raciocinio, quedaron solo los suspiros entonando la melodía del amor Busque con insaciable esperanza la génesis de aquello sobrenatural, esa entrega que impregna el alma en la eternidad de los recuerdos . H. Padilla Carrasco Leceheria, 02/06/2015
TANTAS VECES ... Tantas veces quise que tus labios me besaran hasta que escribieran tu nombre en los míos. Tantas veces quise que me abrazaras hasta que tu respirar tomara mi cálido aire. Tantas veces quise acercarme a ti, mas que el vestido a tu cuerpo. Tantas veces quise acercarme a ti, como la imagen a tu dulce mirada. Tantas veces quise decirte que te amo, mas que las olas arribando a la arena de la playa. Tantas veces quise decirte que te amo, como la suma de los titilares de las estrellas. Tantas veces quise acercarme a ti, fue tantas las veces que regrese solo, sin poder decirte tantas cosas bellas. Tantas veces lo intente, que la esperanza se perdió conmigo en las calles del olvido, por ser los últimos en perdernos. Cuantas veces he caminado solo las calles del olvido, donde siempre encuentro mi fiel amiga, la soledad. Lecheria, 09 de mayo de 2015

jueves, 3 de octubre de 2013


MI POESIA

Busco en la selva inexplorada de sus letras,
sin saber lo que busco,
sin saber que camino tomar, ... ella lo dirá,
ella comprende mis deseos, conoce mi tristeza,
ella ha llegado a mi alma ... ella, sobre mi,
lo sabe todo, es mi oculto refugio.

A ella acudo cuando la vida golpea,
cuando traicionan los sentimientos,
cuando la incomprensión es cotidiana,
cuando la esperanza es lenta,
cuando la angustia se desborda.

También cuando los pensamientos
fluyen como el arroyo de invierno,
como el universo cuando espera
los piropos a sus confines,
como el entorno ahogado en su armonía.

El tiempo es nuestro aliado
cuando transcurre en su cauce
buscando en sus profundidades,
donde nadie todavía ha tocado
esa diversidad de empeños alucinantes.

Se despide contenta sabiendo
que nos volveremos a ver
en sus hermosos caminos,
adornados con la luz brillante
e inagotable de sus propias luciérnagas.


H. Padilla Carrasco
lecheria, 02 de oct. 2013

viernes, 20 de septiembre de 2013

La Ventana ...

Abrí mi ventana para dejar entrar el rocío
que calma la sed del alma inquieta, 
y el fresco soplo del amanecer despertó 
como esperanza, que entrelazada
con los sueños, comulgan como hálito
del ser y testimonio de la propia existencia.

Se desliza la mirada desde el balcón
de los pensamientos, en la búsqueda
de aquella gota que como diadema preciosa 
envuelve la preciada ilusión de encontrar 
su otra gota ... y su otra gota ...  para formar
ese caudal que avasalla y domina hasta 
oprimir el sentimiento, sometiéndolo a su antojo.

Solo el tiempo los vio pasar con la prisa
que angustia, que arrasa los retoños
de lo alucinante, sembrando la inclemente soledad, 
lo abstracto de la realidad de lo imposible, que 
embarga la percepción de los sentidos.

Allí están, allí se quedan en el cementerio 
de los sueños incumplidos, pero, con el verdor
de volver a abrirle el alma a la oportunidad
de hacerla sentir junto a la carnal compañía,
la razón que prevalece por encima de la cordura.



H. Padilla Carrasco
Lechería, 17/9/13 

miércoles, 11 de septiembre de 2013

ESPERANZA ... - Google Drive

ESPERANZA ... - Google Drive


Mis entrañas gritan y el corazón sufre,
anhelo mis ansias del amor sin rostro
vivir como la gota inmersa en el mar,
como estrella en el firmamento oscuro.

Caudal de sentimiento, huracán de pasión,
resquebrajado en el tiempo aciago,
de la brizna que vuela sin destino,
y esperanza  alimentada en rastrojo propio.

Luciérnagas danzan en el vientre bendito,
testimonio de confusión presagia tormenta,
olas levantan encrespadas y gemidos aullan,
retumbar alocado palpa la pradera del sueño.

Miedo y complicidad en tímidas gotas,
el surco guía el destino aclamante,
y la sombra con caricia traicionera
buscan albergar el infinito amor.



H. Padilla Carrasco
Lecheria, 11/09/2013